domingo, 26 de septiembre de 2010
ÍMPETU.-
¿Y ahora que hago con esta soledad?
¡Herrumbrarme!
¿Gastarme a muerte en versos que no riman?
Rimarme con las sombras del silencio
Para que los demonios del tormento
¡me sonrían!
¿y cómo se vive en esta eternidad?
¡un minuto
Que se burla cual si fuese una centuria!
Azules fracturados se destiñen,
Diamantes que en mis manos de derriten
¡por mi culpa!
¿Do yace lo feliz, lo que antes era?
¡Agoniza
Tras la pérgola falsaria de la duda!
Y camina en la arena y se quema,
Y camina en el desierto a la espera
¡de la lluvia!
¿Qué importa el mañana y su promesa?
¡nada importa!
La fuerte necedad de esta locura
No acepta la soberbia de las rosas,
Ya es mía la cadencia de estas horas
¡también tuya!
Danzaran las ganas que no duermen
¡ni de noche!
Con el humo del pucho que desgarro,
llegarás, moraras aquí en mi pecho
Porque yo así lo exijo, así lo quiero
¡porque te amo!
CEMENTO.-
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Permíteme Cemento/Marcelo que te aplauda. Tienes un estilo que engancha. Tus poemas son de esos que no quieres que se acaben nunca, se me hacen cortos.
ResponderEliminar"Porque yo así lo exijo, así lo quiero
¡porque te amo!"
Este "retal" tiene mucha fuerza y cómo indica el título..Ímpetu.
Saludos
nunca te lei asi
ResponderEliminardeclarando el impetu que te corroe
por que asi lo exijes asi lo quieres
la amas.....
que fuerza varon